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jueves, 8 de enero de 2009

Layenda del Grial .... lV

En la literatura caballeresca el Grial es propiamente un objeto sobrenatural, que tiene esencialmente estas virtudes: alimenta ("don de vida"); ilumina (iluminación espiritual); convierte en invencible (quien lo ha visto, n’en court de bataille venchu, según Robert de Boron). En cuanto a los restantes aspectos, hay que señalar dos. Sobre todo el Grial es una piedra celeste, que no sólo designa a los reyes –como la piedra que los Thuata llevaron consigo al Avalón– sino que indica también a los dominadores destinados a convertirse en "Preste Juan" (de acuerdo al "Triturel").

En segundo lugar, el Grial sería la piedra caída de la corona de Lucifer en el momento de su derrota (de acuerdo al "Wartburgkrieg"). Como tal, el Grial simboliza un poder que Lucifer, al caer, perdiera, y el mismo también en otros textos conserva el carácter de un mysterium tremmendum. Como una fuerza temible, el Grial mata, despedaza, enceguece a los caballeros que se le acercan sin ser dignos del mismo y sin ser los elegidos (según el "Grand St. Graal", "Joseph de Arimathia", etc.). Este aspecto del Grial se encuentra en relación con la prueba del "lugar peligroso". A la Mesa Redonda de Arturo le falta ya alguien, Un lugar se encuentra vacío, el cual, en el fondo, es el del jefe supremo de la Orden. Aquel que lo ocupa sin ser el héroe esperado, es fulminado o es tragado por una súbita vorágine. El Grial puede ser alcanzado tan sólo combatiendo –er nuos erstriten werden – dice Wolfram von Eschenbach. El misterio del Grial comprende dos temáticas.

La primera retoma la idea de un reino simbólico, concebido como una imagen del centro supremo; reino, que debe ser restaurado. El Grial no está más presente allí, o bien ha perdido su virtud. El rey del Grial está enfermo, herido, decrépito, o bien padece un sortilegio, en razón del cual él parece vivir, conserva una apariencia de vida, aun estando muerto desde siglos (según el "Diû Krone"). La otra temática consiste en la llegada de un héroe que, habiendo visto al Grial, debe sentirse llevado hacia una tal restauración; de otro modo él traicionará su misión y su fuerza heroica será maldita (según Wolfram von Eschenbach). Él debe volver a unir una espada partida. Él debe ser el vengador. Él debe "formular la pregunta". ¿De qué pregunta se trata? ¿Y cuál es propiamente la misión de este "elegido"? Parece ser la misma que Hesíodo atribuye a los "héroes", es decir, a aquella misma generación que, nacida en la edad oscura de la decadencia, tiene sin embargo aun la posibilidad de restaurar la "edad del Oro". Y así como el héroe hesiódico debe superar y gobernar el elemento titánico, de la misma manera vemos que el héroe del Grial debe superar el peligro luciférico. No basta que el caballero del Grial se muestre como "el mejor y el más valiente caballero del mundo" y un corazón de acero –"ein stählernes Herz"– en cada tipo de aventuras naturales y sobrenaturales: él debe también "estar libre de orgullo" y debe "conquistar la sabiduría" (según Wolfram y Gautier).

Si el Grial ha sido perdido por lucifer, he aquí que algunos textos (Grand St, Graal, Gerbert de Mostreuil, "Morte Darthur") refieren justamente a Lucifer el poder demoníaco que actúa en diferentes pruebas en contra de los caballeros del Grial. Además el viejo rey del Grial se ha hecho impotente e incapaz de reinar en razón de una herida que se le hiciera con una lanza envenenada mientras él se encontraba al servicio de Orguelluse: pero es bastante visible que esta Orguelluse no es sino una personificación femenina del mismo principio del "orgullo". Además otros caballeros del Grial, por ejemplo Gauvain ("Galvano"), son puestos a la prueba en el castillo de esta misma Orguelluse. Pero ellos no sucumben. Vencen, desplazan –"poseen"– a Orguelluse.

El sentido de esta prueba es la realización de una fuerza pura, de una virilidad espiritual; es la transposición de la calificación heroica sobre un plano separado de todo lo que es caos y violencia, "La caballería terrestre debe convertirse en caballería celeste" – se dice (Queste du Graal). Ésta es la condición para poder abrirse el camino hasta el Grial, para poder ocupar el "lugar peligroso" sin ser fulminados, así como lo fueron los titanes por parte del Dios olímpico. Sin embargo como tema fundamental de todo el ciclo del Grial debe ser considerado el siguiente: al héroe de todas estas pruebas se le impone una tarea ulterior y decisiva. Una vez que ha sido admitido en el castillo del Grial, él debe sentir la tragedia del Rey del Grial herido, paralizado o viviente sólo en apariencia y debe tomar la iniciativa de una acción de restauración absoluta.

Ello es expresado por los textos en varias formas enigmáticas: el héroe del Grial debe "formular la cuestión". ¿Cuál cuestión? Aquí se diría que los autores han querido callar. Se tiene la impresión de que algo les impide hablar y que una explicación banal esconda la respuesta verdadera. Pero si se sigue la lógica interna del conjunto no es difícil comprender aquello de lo que en verdad se trata: la cuestión a formular es la cuestión del Imperio. No se trata de saber –como según la letra de los textos– lo que significan ciertos objetos del castillo del Grial, sino que se trata de comprender la tragedia de la decadencia y, luego de haber "visto" el Grial, de formular el problema de la restauración. Sólo sobre esta base la virtud milagrosa de esta enigmática pregunta se convierte en comprensible: puesto que el héroe que no ha sido indiferente y que ha "formulado la cuestión", con esta cuestión redime el reino. Entonces aquel que tenía tan sólo una apariencia de vida desaparece; aquel que estaba herido se cura. A veces, el héroe se convierte en el nuevo y verdadero rey del Grial sustituyendo al precedente.

Un nuevo ciclo comienza. Según algunos textos, el caballero muerto, que parece querer recordar al héroe la misión a cumplir y la venganza, aparece en un ataúd transportado sobre el mar por cisnes. Pero el cisne es el animal de Apolo en el país de los Hiperbóreos, en la tierra nórdica primordial. Conducidos por cisnes parten los caballeros del centro supremo, en el cual Arturo es rey: desde el Avalón. En otros textos, el héroe del Grial es llamado el caballero de las dos espadas.

Pero en la literatura teológico-política de la época, sobre todo en la gibelina, las dos espadas significaban nada más que el doble poder, temporal y sobrenatural. Un texto clásico habla del país hiperbóreo como de la tierra de la que vinieron dinastías que, como las de los Heraclidas, encarnaron a un mismo tiempo la dignidad regia y la sacerdotal. En un texto del Grial la espada que será vuelta a unir tiene una custodia cuyo nombre es: memoria de la sangre.

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